01.08.21
Titular de la WKKF
Noticias

Este tiempo de curación y unidad

Las alarmantes escenas en el Capitolio de Estados Unidos aún están frescas en la memoria de muchos y los sentimientos que evocan son poderosos. 

Esos sucesos ilustraron una dura verdad sobre la división en este país, y lo profundamente que daña nuestra humanidad y nuestra democracia. Para muchos, la violencia dejó al descubierto una vieja herida que ha estado supurando durante generaciones. Tras los sucesos, se está hablando y escribiendo mucho sobre el dolor, la conmoción y la rabia, mientras las personas, las familias, los amigos y las comunidades siguen procesando los acontecimientos. 

Pero en muchos corazones, la pregunta que ya está surgiendo es con la que empezamos: "¿Qué hace falta para sanar?". 

La curación es un trabajo duro y profundo. Exige mucho del cuerpo, la mente, el corazón y el alma, y requiere tiempo, dedicación y auténtico valor. Sin embargo, nuestros beneficiarios y socios afirman que la curación es el camino a seguir. Es la forma de garantizar que todos nuestros niños y niñas tengan un futuro más sano, más seguro y más fuerte. 

Esta comprensión es la fuente de la larga trayectoria de Fundación W.K. Kellogg compromiso hacia la sanación racial y hacia proceso de donaciones, prácticas y herramientas que pueden ampliar el círculo de sanación. Como organización antirracista consolidada, sabemos que la curación está en el corazón de equidad racial. 

En este momento, y en estas difíciles circunstancias, los llamamientos a la sanación proceden de muchos sectores y con mayor urgencia. Nos unimos a ellos con renovada determinación y ofrecemos una forma de empezar. 

Nuestro quinto Día Nacional de Sanación Racial virtual se fijó para el 19 de enero de 2021 hace muchos meses. Es el momento de mantener conversaciones sinceras, compartir verdades difíciles, escuchar profundamente y encontrar juntos el camino a seguir. Como bien saben los beneficiarios y socios , no es el camino más fácil. Pero es un trabajo crucial para este momento. 

Comprometámonos con la sanación por encima del odio, con la unidad por encima de la división, en nombre de todos nuestros niños y niñas, nuestras comunidades y nuestro país.